Por: Montse Huerta.
El estadio de los Dodgers enmudeció la noche de ayer después de que los Astros de Houston consiguieran el primer título de su historia en las Grandes Ligas al derrotar 5-1 a los Dodgers de Los Ángeles en el séptimo juego de la Serie Mundial.
Por segundo año consecutivo, el equipo visitante obtuvo el campeonato en el Juego 7, luego de que los Cachorros de Chicago derrotaran a los Indios de Cleveland en el Progressive Field en 2016. En los últimos 12 años seis equipos han ganado la Serie Mundial en patio ajeno.
Astros pudo conquistar ésta su primera corona en el llamado “Clásico de Otoño”, tras vencer a Dodgers por 7-6 en 11 entradas, 5-3, 13-12 en 10 innings y el 5-1 de noche, a cambio de tres derrotas por 3-1, 6-2 y 3-1.
Houston consiguió el título en su segundo viaje al clásico de otoño, luego de que fuera barrido hace 12 años por los Medias Blancas de Chicago. Por su parte, los Dodgers se quedaron con las ganas de llegar a siete campeonatos y sufrieron su derrota número 13 en Series Mundiales. La última vez que se coronaron fue en 1988.
En esta Serie Mundial los peloteros hispanos han sido los protagonistas de la acción sobre el diamante batazo a batazo, ofreciendo un espectáculo digno de aplausos y jugadas que nos hicieron vibrar. Banderas de Puerto Rico, Venezuela, Republica Dominicana y Cuba se han visto por todas partes y ondearon con mucho orgullo cada vez que uno de sus protagonistas nos regalaba una buena jugada.
Un nuevo record se estableció en cuanto a cuadrangulares conectados superando la marca que tenia la edición 2002. El jardinero central de los Astros de Houston, George Springer, igualó la marca histórica de cinco cuadrangulares en una sola Serie Mundial, establecida por el ”Señor Octubre” Reggie Jackson en 1977 con los Yankees de Nueva York, curiosamente también en contra de los Dodgers de Los Ángeles. Springer, de origen puertorriqueño, fue nombrado Jugador Más Valioso (MVP) de la Serie Mundial.
Felicidades a ambos equipos por regalarnos una Serie Mundial muy competitiva, que mantuvo atentos a los fanáticos hasta el final de cada juego.